11/01/2025
Manuel Belgrano, una de las figuras más emblemáticas de la historia argentina, no solo se destacó como militar y político, sino también como un ferviente promotor de la educación. Su propia formación académica fue fundamental para el desarrollo de su pensamiento ilustrado y su posterior accionar en pos del progreso y la independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Conocer los lugares donde forjó su intelecto nos permite comprender mejor al hombre detrás del héroe.

Nacido en Buenos Aires el 3 de junio de 1770, Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano tuvo el privilegio de crecer en una familia acomodada y culta, lo que le permitió acceder a una educación de calidad desde temprana edad. Sus padres, don Domingo Belgrano y Peri, un próspero comerciante genovés, y doña María Josefa González Casero, proveniente de una familia de antiguo arraigo en la ciudad, le brindaron a él y a sus diez hermanos una esmerada educación.
- Primeros Pasos Académicos en Buenos Aires
- La Etapa Universitaria en España: Leyes y Nuevas Ideas
- Belgrano como Promotor de la Educación en el Río de la Plata
- El Legado Educativo de un Prócer
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Preguntas Frecuentes sobre la Educación de Belgrano
- ¿A qué colegio asistió Manuel Belgrano en Buenos Aires?
- ¿Dónde estudió derecho Manuel Belgrano?
- ¿Qué otras materias estudió Belgrano en Europa además de derecho?
- ¿Belgrano solo se dedicó a estudiar leyes en España?
- ¿Promovió Manuel Belgrano la creación de escuelas?
- ¿Qué hizo Belgrano con el premio que recibió por las batallas de Tucumán y Salta?
Primeros Pasos Académicos en Buenos Aires
Sus primeras letras las cursó en su ciudad natal, Buenos Aires. Si bien el texto proporcionado no especifica la institución exacta donde recibió esta educación inicial, sí detalla su paso por un establecimiento clave para la juventud de la época: el Colegio San Carlos. Bajo la dirección del Dr. Luis Chorroarín, Belgrano se sumergió en el estudio del latín y la filosofía. Estos años en el Colegio San Carlos fueron cruciales para su formación básica y el desarrollo de sus habilidades intelectuales antes de emprender su viaje a Europa.
El 8 de junio de 1787, mientras ya se encontraba en España, se le otorgó el diploma de licenciado en filosofía, un reconocimiento a los estudios cursados en el Colegio San Carlos. Esta distinción temprana da cuenta de su dedicación y aptitud académica desde joven.
La Etapa Universitaria en España: Leyes y Nuevas Ideas
Siguiendo la costumbre de las familias pudientes de la época y con el propósito de instruirse en el comercio, su padre lo envió a España. Sin embargo, los intereses de Manuel Belgrano pronto se volcaron hacia otras áreas del conocimiento. Fue en la península ibérica donde completó su educación superior, matriculándose en la Universidad de Salamanca.
Aunque el texto menciona su matrícula en Salamanca, su graduación como abogado tuvo lugar en Valladolid en el año 1793. Este período universitario en España, que abarcó desde 1787 hasta 1793, fue determinante. Más allá de la carrera de abogacía, Belgrano se sintió profundamente atraído por las nuevas corrientes de pensamiento que circulaban en Europa. La Revolución Francesa, a pesar de la censura, influenció sus ideas, y se interesó vivamente por conceptos como la libertad, la igualdad, la seguridad y la propiedad. Como él mismo confesó: "mi aplicación no la contraje tanto a la carrera que había ido a emprender, como al estudio de los idiomas vivos, de la economía política y al derecho público…"
Se familiarizó con las ideas de los fisiócratas y leyó a autores relevantes como Campomanes, Jovellanos y Alcalá Galiano. También dedicó tiempo al estudio de idiomas vivos, lo que amplió su acceso a diversas fuentes de conocimiento. Su estancia en Europa no se limitó a las aulas; conoció la vida de la Corte, viajó por la Península y cultivó su espíritu a través de la lectura y la interacción con intelectuales de la época. Esta formación multifacética en derecho, economía política y derecho público, sumada a su apertura a las ideas ilustradas, lo preparó de manera excepcional para los desafíos que enfrentaría a su regreso al Río de la Plata.
Belgrano como Promotor de la Educación en el Río de la Plata
Su experiencia en Europa, donde observó el desarrollo económico y social impulsado por el conocimiento y la educación, reforzó su convicción sobre la importancia fundamental de la enseñanza para el progreso de su patria. A su regreso a Buenos Aires en 1794, investido como Secretario perpetuo del Consulado, Belgrano utilizó su posición para impulsar una agenda reformista centrada en la educación y la economía.
Apoyó con vehemencia la creación de establecimientos de enseñanza técnica y práctica. Fruto de su iniciativa, surgieron la Escuela de Dibujo y la Escuela de Náutica. No se limitó a apoyarlas; redactó sus reglamentos, pronunció discursos inaugurales, alentó a los jóvenes estudiantes y luchó por dar solidez a estas instituciones, a pesar de las dificultades y la incomprensión de las autoridades coloniales. Su visión iba más allá de la formación tradicional; buscaba dotar a la sociedad de herramientas para el desarrollo económico a través del conocimiento aplicado en áreas como la agricultura, la industria y el comercio.
En sus memorias anuales ante el Consulado, Belgrano insistía en la necesidad de fomentar la agricultura y la industria, y siempre vinculaba este fomento a la educación. Propuso la creación de escuelas de agricultura y de comercio. Su visión era amplia e inclusiva; planteaba la necesidad de establecer escuelas de primeras letras en todas las parroquias, y, adelantándose a su tiempo, incluía explícitamente la educación para las niñas y las mujeres, reconociendo su dignidad y potencial contribución a la sociedad.
Esta faceta de Belgrano como educador y visionario de la importancia de la enseñanza es tan relevante como su actuación militar y política. Comprendió que sin una población educada, el progreso y la libertad serían difíciles de alcanzar.

El Legado Educativo de un Prócer
Incluso en medio de las campañas militares y las dificultades de la guerra, el espíritu educativo de Belgrano nunca decayó. Un ejemplo conmovedor de su compromiso con la educación se manifiesta tras las victorias de Tucumán y Salta. La Asamblea Constituyente de 1813 decidió premiarlo con una suma de 40.000 pesos y un sable de honor por sus triunfos. Belgrano, con su característica generosidad y desinterés, declinó el premio económico y solicitó que ese dinero fuera destinado a la creación de cuatro escuelas en Tarija, Jujuy, Tucumán y Salta, las provincias que tanto lo habían apoyado en la lucha.
Esta decisión subraya la prioridad que la educación tenía para él. Vio en las escuelas la herramienta más poderosa para construir el futuro de la patria por la que luchaba. Aunque la concreción de estas escuelas enfrentó demoras y dificultades, el gesto de Belgrano quedó grabado en la historia como un testimonio de su visión y su compromiso con el bienestar de su pueblo a través del conocimiento. Su famosa frase "Que renunciar, es poseer" cobra especial sentido en este acto, al renunciar a un premio personal para "poseer" la posibilidad de educar a futuras generaciones.
Preguntas Frecuentes sobre la Educación de Belgrano
A continuación, respondemos algunas preguntas comunes sobre los estudios y la relación de Manuel Belgrano con la educación, basándonos en la información disponible:
¿A qué colegio asistió Manuel Belgrano en Buenos Aires?
En Buenos Aires, Manuel Belgrano cursó sus estudios secundarios en el Colegio San Carlos, donde estudió latín y filosofía antes de viajar a Europa.
¿Dónde estudió derecho Manuel Belgrano?
Manuel Belgrano estudió derecho en España. Se matriculó en la Universidad de Salamanca y se graduó como abogado en la ciudad de Valladolid en 1793.
¿Qué otras materias estudió Belgrano en Europa además de derecho?
Durante su estancia en Europa, Belgrano dedicó mucho tiempo al estudio de los idiomas vivos, la economía política y el derecho público. Se interesó por las nuevas ideas de la Ilustración y las teorías económicas de la fisiocracia.
¿Belgrano solo se dedicó a estudiar leyes en España?
No, aunque se graduó de abogado, Belgrano mismo afirmó que su principal interés en España se volcó hacia el estudio de los idiomas, la economía política y el derecho público, influenciado por las ideas de la época.
¿Promovió Manuel Belgrano la creación de escuelas?
Sí, Manuel Belgrano fue un incansable promotor de la educación. Como Secretario del Consulado, impulsó y apoyó la creación de la Escuela de Dibujo y la Escuela de Náutica. También propuso la fundación de escuelas de agricultura, comercio y escuelas de primeras letras en todas las parroquias, incluyendo la educación para mujeres.
¿Qué hizo Belgrano con el premio que recibió por las batallas de Tucumán y Salta?
Belgrano rechazó el premio económico de 40.000 pesos otorgado por la Asamblea Constituyente y solicitó que ese dinero fuera destinado a la creación de cuatro escuelas en las provincias de Tarija, Jujuy, Tucumán y Salta.
En resumen, la educación de Manuel Belgrano fue un pilar fundamental en su vida y en su accionar público. Desde sus años en el Colegio San Carlos de Buenos Aires hasta su formación universitaria en España, absorbió conocimientos y abrazó ideas que lo convertirían no solo en un líder militar y político, sino también en un visionario que entendió la educación como la base indispensable para el progreso y la libertad de una nación.
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